viernes, 20 de febrero de 2009

Las crónicas anacrónicas del niño zombie

En donde los caniches pastan descalzos (Antes)

A veces no entiendo…

¿Es que la distancia que tengo entre mi desconcierto y el tuyo es tan grande como el valor del infinito en el tiempo?

De momento parece que todo es incorrecto, de momento no te encuentro o te siento muchos centímetros debajo de mis sueños.

¿A dónde vas cuando no estás conmigo?

¿A quién le fías las maravillas que a mí sólo me sugieres en risas y consonantes?

Quizá después de todo el reloj no camina con el mismo tiento entre tus pies y mis garras.

(Suspiro de interrogantes)

Entre tu Lunes y el mío, hay muchos años de impertinente diferencia.

Sin nombrar la indiferencia…

¿Cómo puedo edificarte un monumento en mi pecho con tanto silencio?

¿Cómo puedo conformarme con tus tres líneas repetidas cuando antes te leía en mil versos?

Antes…

A veces no entiendo por qué el ANTES siempre es el mejor momento.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

quiza sea el mejor porque ya ha pasado, lo conocemos y sabemos que esperar, sin ilusiones falsas...el antes no tiene remedio...

En cambio el hoy y el mañana pueden ser el regalo tan anhelado, o simplemente el anfora que abrió Pandora.....porque no sabemos si lo que deseamos sucederá...si será mejor que los sueños o si nos desilusionará.....

creo que necesitamos hablar Daniel....mmmm.....necesitamos hacerlo definitivamente....espero pronto, muy pronto querido

Mi amor dijo...

Hoy quiero regresar al Antes...

Que no sea verdad que vaquero espacial haya muerto

a veces todos nos resumimos en tres lineas